Ginebra: el sonido que estabas buscando…

Por Ramiro García Morete

Tras años de camino, Agustina Reynoso encara su proyecto propio de R&B y edita “No quería irme” .Esta noche- protocolo mediante-  se presenta a las 20 en Casa Pulsar. (Foto: Jota Kook)

“¿Adónde vas cuando ya no estás? ¿Y  en dónde estás cuando estás acá?”. Había estado casi dos años sin su música. No la música, dado que la docencia en la misma Facultad de Artes a la que llegó en el 2012 mantuvo el vínculo intacto. Pero  tras Prismáticos, esas canciones que había comenzado a componer habían quedado postergadas. No como los temas que boceteaba en su adolescencia en Mar del Plata, cuando signada por la música inglés se movería desde Britney a Green Day para hallar lugar en la llamada “música negra”.  Sencillamente habían quedado ahí, en la computadora o ese cuaderno en el que escribe cosas sueltas, antes o después de tomar la Bamboo que compró para un viaje o sentarse en junto al Yamaha.

“El piano es mi instrumento principal”, dirá quien primariamente concibe su música con un sonido orgánico.  Tanto como la banda que se había formado en el Ciclo de Jitmi, jam de funk y lindantes que durante el 2019 se llevó a cabo en Rey Lagarto.  Allí recuperaría no solo la sensación cantar sobre un escenario sino que confirmaría la voluntad de darle forma a sus composiciones.  Adriano Di Martino, tecladista de la formación estable, sería el socio perfecto y  lideraría el equipo finalmente conformado por Pol Poloni (guitarras),  Nehuen Villanueva (bajos ), Guido Barciulli (batería) y Piwi Funtime (master). La pandemia no detendría el proceso, sino que más bien lo conduciría.

Ya con un enfoque más digital, comenzaría un cavilado proceso de producción con clara orientación R&B. Una articulación de beats, bajos,  múltiples capas y detalles con una intención deliberadamente dinámica: paneos, cambios de tempo, voces filtradas,  sonidos incidentales. La arquitectura ideal para que la vocalista despliegue el groove y oficio adquirido para versar sobre relaciones  y desencuentros. Un EP sobre despedidas sería curiosamente su presentación: “No quería irme”. Así  se llama  el debut de Ginebra, proyecto encabezado por Agustina Reynoso, que esta noche se podrá disfrutar desde las 20 en Casa Pulsar (58  N°512)

“Estoy muy contenta-introduce la cantante-. Es mi primer trabajo como solista. He tocado mucho tiempo en banda. Pero este es el primer  material propio y estoy  muy conforme con lo que quedó”. Y hace hincapié en el “el nivel de detalle en cada una de las canciones.  Era una parte de lo que queríamos lograr, tanto en el estilo o género  como en nivel de detalles. Ahí es muy importante Adriano Martino, un músico que trabaja muy bien y estoy muy contenta. Es parte de mi banda, ,lo van a escuchar tocando conmigo. Estábamos buscando que sonara de esa manera, donde hay mucho trabajo textural”. 

Esa búsqueda también incide en la parte vocal, donde la artista demuestra gran versatilidad: “La verdad es que la interpretación viene siendo una búsqueda constante. Yo toqué desde covers hasta temas propios…Me gusta mucho trabajar la construcción, día a día, a la hora de componer o en los mismos ensayos”.

“En particular en  este EP,  las tres canciones están ligadas en una historia. En estos temas laburé en torno al tópico del amor, el desamor y qué pasa en el tiempo.  Después sí…escribís una situación que te pasa, armas una construcción más poética y luego la canción va tomando su forma. Hay que ver las posibilidades a la hora de escribir una canción”.

Respecto al concierto de esta noche no oculta la alegría de “volver a tocar en vivo. Todo está difícil por las restricciones, protocolos. Y además escasean lugares para bandas con temas propios.  Y en paralelo seguiré trabajando en canciones y ya tengo un par de colaboraciones”.

SECCIONES