Por Alejandro Palladino
La CTA provincia de Buenos Aires presentó un informe elaborado por su Instituto para el Desarrollo Económico y Social de Buenos Aires (IDESBA) en el que expone, como balance del primer año, dos trabajos que se centran en “la inviabilidad del modelo económico” de la gestión nacional en manos de la alianza Cambiemos y en “la ofensiva contra los trabajadores” por los impactos que las medidas de ajuste generaron en los bolsillos, solventadas por un inédito reendeudamiento externo.
El estudio al que accedió este medio resalta el incumplimiento de la gran mayoría de las promesas que el líder del PRO hizo en su campaña como solución a los límites económicos de los últimos años. Subraya las medidas económicas de “ajuste regresivo que terminaron por dar un resultado sumamente negativo para los sectores populares y el conjunto de los trabajadores: estanflación (una profundización de la recesión con niveles de inflación inéditos, superiores al 40% anual), pérdida de 100.075 puestos de trabajo registrados en el sector privado y del poder adquisitivo de sus salarios en un 9,7%, que derivan en menor consumo popular, y que implican en todos los casos peores condiciones de vida para estos sectores”.
estanflación (recesión con niveles de inflación superiores al 40% anual), pérdida de 100.075 puestos de trabajo en el sector privado y del poder adquisitivo de los salarios, son datos que dio a conocer la CTA.
Roberto Baradel, secretario general de la CTA provincia de Buenos Aires y del gremio docente Suteba, dijo que el informe “es una herramienta de trabajo que nos aporta a los trabajadores insumos concretos e importantes para dar el debate con los legisladores y el Gobierno”.
Junto a él en la mesa en la que fue presentado el estudio, en la sede que la CTA tiene en La Plata, estuvieron Raúl Calamante, secretario general adjunto de la CTA, Silvia Almazán, secretaria de Educación y Cultura de Suteba y directora del IDESBA, y el equipo de trabajo que realizó el informe.
“Es un análisis de la realidad por parte de los trabajadores en dos direcciones: la construcción de demandas para revertir las realidades desfavorables que viven los trabajadores y también para transformar esas propuestas en políticas públicas”, señaló Silvia Almazán.
A partir de cuatro ejes, el informe se focaliza en “las grandes inconsistencias y límites entre los objetivos propuestos y las políticas macroeconómicas llevadas adelante, que dificultan un pronóstico favorable para 2017”.
Este trabajo se suma al que hizo el IDESBA a cien días de haber asumido Cambiemos, en el que resaltaba quiénes eran los sectores que resultaron ganadores por las medidas macroeconómicas del Gobierno nacional. En este caso detalla las inconsistencias del modelo neoliberal y apunta a los sectores desfavorecidos por la receta de Mauricio Macri, quien en pocos meses aumentó significativamente la pobreza.
Los cuatro ejes que dan cuenta de las inconsistencias del modelo refieren a:
-La suba de interés de las Letras del Banco Central (LEBAC), que “se propuso como uno de los principales mecanismos de la política monetaria para reducir la inflación, fracasó rotundamente y entró en contradicción con otras variables económicas».
-El fracaso en cuanto a la reducción del déficit fiscal a pesar de haber reducido el gasto público, y habiendo desfinanciado al Estado por la quita de retenciones al agro y a la minería.
-La apuesta a ser el “supermercado del mundo” con ayuda de la inversión extranjera, que tampoco tuvo el efecto que esperaba el Gobierno. El estudio fundamenta este punto sosteniendo que “a pesar de haber hecho todos los deberes (desregulación y liberalización comercial, devaluación, quita y/o reducción de retenciones a las exportaciones) para mostrar ‘condiciones de seguridad’ a los capitales privados –fundamentalmente a los extranjeros–, y de que efectivamente en tan solo un año de gobierno la estructura exportadora se reprimarizó notablemente, las exportaciones, lejos de ser el componente dinamizador de la economía, tienen una menor gravitación en la demanda agregada y los capitales extranjeros operaron como una de las fugas de divisas más importantes”.
-El cuarto y último eje es el motor de la economía de Cambiemos, el que “esconde las inconsistencias”: el aumento en tan sólo un año de la deuda externa en 40 mil millones de dólares, y que en el primer semestre de 2016 llegó a duplicar su participación en el PBI en relación a 2015 al gravitar en torno al 19,5%.
“La historia de nuestra deuda externa y el destino que ha tenido en 2016 bajo el gobierno de Macri corroboran que se trata de una pérdida de soberanía, mayor dependencia y una mayor exposición a los vaivenes de una economía mundial en crisis”, cierra el informe.