Tensión en la frontera entre Brasil y Venezuela

Tras una serie de hechos violentos contra inmigrantes venezolanos y luego de la visita del secretario de Defensa de los Estados Unidos, James “Perro Rabioso” Mattis, el gobierno del golpista brasileño Michel Temer decidió enviar fuerzas militares a la frontera con Venezuela.

Según se informó desde el Ministerio de Seguridad Pública de Brasil, agentes de la Fuerza Nacional fueron trasladados a la frontera para reforzar la seguridad en el municipio brasileño de Pacaraima, en el estado de Roraima.

El bloqueo económico y financiero de Washington contra Venezuela ha limitado al extremo la compra de medicamentos y, en combinación con un sector del empresariado local, ha generado un enorme desabastecimiento.

Decidido a derrocar al gobierno de Venezuela, Estados Unidos ha desatado un asedio sin límites. Desde la arremetida diplomática, hasta el intento de magnicidio, pasando por el bloqueo económico, el financiamiento de grupos violentos y la guerra comunicacional, la agresión contra el gobierno y el pueblo venezolano ha tomado todas las formas posibles.

El bloqueo económico y financiero de Washington contra Venezuela ha limitado al extremo la compra de medicamentos y, en combinación con un sector del empresariado local, ha generado un enorme desabastecimiento. Todas estas medidas han provocado un gran daño en la vida cotidiana de los ciudadanos de ese país caribeño y han hecho que miles de venezolanos busquen refugio en otros países de la región.

Pacaraima, en la zona de la Amazonía, se ha transformado en uno de los puntos clave del ingreso a Brasil. Este fin de semana, un campamento de venezolanos instalado en esa zona fue atacado con disparos por un grupo de violentos. Los agresores incendiaron las carpas y obligaron a los caribeños a huir de regreso a su país. Tras estos hechos, el gobierno golpista decidió enviar fuerzas militares a la zona.

Los hechos que dieron pie al envío de tropas militares se dan luego de la gira de Mattis, jefe del Pentágono, en la que el principal tema que habló en Brasil, Argentina y Colombia fue el de aumentar la agresión a Venezuela.


 

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