Por Claudia Vásquez Haro*
Las declaraciones de Julio Garro, precandidato a intendente en La Plata por el PRO, en el programa 221 Radio en referencia a la comunidad trans platense generan estupor y nuestro más enérgico repudio. Invitamos a reflexionar a la ciudadanía platense a la hora de emitir su voto. Es preciso hacer un análisis exhaustivo de las incoherencias vertidas en sus declaraciones por el representante de Mauricio Macri en La Plata. Lo único que hacen es confundir a la sociedad platense, dividir y potenciar la discriminación hacia nuestro colectivo, uno de los más vulnerados de la sociedad civil.
En principio, sus dichos no respetan la ley de identidad de género autopercibida: en todo momento trata en masculino a las compañeras trans, refiriéndose a “los travestis”. Me pregunto en qué país vive esta persona. No se enteró que en 2012 el Congreso argentino sancionó la Ley de Identidad de Género (26.743), donde el Estado reconoce y respeta la identidad de género autopercibida.
Asimismo, desconoce que la prostitución no es un delito, sino el proxenetismo. Argentina suscribe a nivel internacional a un posicionamiento abolicionista, no prohibicionista ni reglamentarista. Es decir, no debe perseguir ni hostigar a aquellas personas que se encuentran ejerciendo esta práctica. La problemática es compleja, pero una de las causas, en la mayoría de las mujeres trans, es que lo hacen porque no existe desde el gobierno municipal una política pública pensada para la inserción laboral en condiciones formales y dignas.
En relación con “la zona roja”, Garro propone: “Se prohíbe con una ley nueva”. Y ante la pregunta sobre qué haría con estas personas, agrega: “a lo mejor darle una mano desde lo psicológico, desde lo médico, pero no se me ocurre darle un trabajo a un travesti, cuando hay padres y madres con hijos que tienen hambre. Es una locura”. Este candidato no habla desde el desconocimiento, sino desde su visión de mundo, reduccionista, conservadora, autoritaria y reaccionaria. Típico de la derecha más recalcitrante.
La discusión de la patologización de las identidades trans es una batalla ganada y está plasmada en la Ley de Identidad de Género. Usted, Garro, retoma un discurso vetusto, apócrifo, que como sociedad y comunidad TLGBI (trans, lesbianas, gays, bisexuales e intersex) hemos trascendimos. Ahora, con la Ley, estamos trabajando en una política pública a partir de un proyecto presentado el año pasado por la concejala Florencia Saintout en el Concejo Deliberante denominado “Plan integral de ciudadanización trans en La Plata”, que contempla la educación, salud, vivienda y, por sobre todas las cosas, el trabajo formal y digno.
A la hora de hacer la distinción en relación con que le daría trabajo a padres, madres desocupadxs y no a una persona trans, desconoce que todos somos ciudadanxs sujetxs de derecho. Sus declaraciones son discriminatorias, potencian el odio, la estigmatización y la exclusión de las integrantes de nuestro colectivo. En su pretensión de ser intendente de La Plata, Garro, no utilice nuestras identidades para hacer su campaña política, porque pone en riesgo nuestras vidas, que, a mi entender, desde su punto de vista no son dignas de ser vividas.
La comunidad trans en La Plata vive constantemente persecución, violencia policial y municipal. Al gobierno de Pablo Bruera, al igual que a usted, tampoco le interesan nuestras vidas, porque son consideradas marginales e indignas. Ambos nos ubican en el lugar de lo inhumano. Pero déjeme decirle que no vamos a volver al oscurantismo. Todo lo conquistado en estos últimos doce años lo vamos a defender hasta con nuestras vidas. Porque no queremos que nuestras futuras generaciones trans vivan lo que nos tocó vivir a nosotrxs. Tenemos memoria y sabemos muy bien que a la derecha le duele, le molesta, que la clase popular, trabajadora, lxs migrantes, lxs gays, lesbianas, trans e intersex ahora tengamos igualdad jurídica. Es sabido que cuando los nadies, los excluidos, conquistamos derechos, ellos pierden sus privilegios.
* Titular de Otrans La Plata.
