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El Marco del golpe

Por Héctor Bernardo

Si hay algo que no se le puede criticar al senador norteamericano Marco Rubio es su coherencia: ha estado en contra de todos los procesos populares de la región. Recientemente, este republicano, ultra derechista, pro sionista y belicista ha salido abiertamente a presionar a los países que no apoyen a Estados Unidos en su arremetida contra Venezuela.

Ante la convocatoria que el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, hizo con la intención de aplicar la Carta Democrática contra Venezuela, Rubio amenazó a República Dominicana, Haití y El Salvador con quitar las subvenciones brindadas por Estados Unidos si estos países no apoyaban la postura intervencionista norteamericana.

A manera de advertencia, el senador aseguró: “Estamos viviendo en un ambiente muy difícil en Washington, donde se están considerando recortes masivos a la ayuda en el extranjero, y para nosotros va a ser bien difícil justificar la ayuda a estos países si ellos, al final del día, son países que no cooperan con la defensa de la democracia en la región”.

Rubio, hijo de inmigrantes cubanos en Estados Unidos, no deja pasar oportunidad para atacar al Gobierno de la Isla, al que siempre tilda de dictadura, al igual que hace ahora con Venezuela.

El pasado miércoles, el vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, difundió una serie de escuchas telefónicas en que quedó evidenciada la complicidad del senador Rubio con los líderes de la derecha venezolana para aplicar un plan desestabilizador contra el Gobierno de Maduro.

En la marcha antiimperialista del pasado martes, Cabello había señalado en forma de pregunta: “¿Quién está detrás de las amenazas a Venezuela? El Departamento de Estado. Son ellos”.

“Nadie se haga ilusiones, el imperialismo hace mucho tiempo sospechó, y estaba en lo cierto, que la Revolución Bolivariana era un peligro para la permanencia del imperio”, remarcó Cabello.

Pero el odio de Marco Rubio no se cierne sólo sobre la región. El senador republicano ha señalado claramente su apoyo al Gobierno sionista de Israel en su arremetida contra el pueblo palestino y también en su intención de seguir una campaña contra Irán. Rubio aseguró: “Israel es todo lo que queremos que las regiones del mundo sean”, e instó a los colegas a apoyar al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.

Marco Rubio, otra de las burdas caras que el imperialismo muestra cuando se quita el maquillaje.


 

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