El Congreso se prepara para votar la nueva ley Ómnibus

La nueva ley de Bases y el paquete fiscal del presidente Javier Milei serán tratados hoy en la Cámara de Diputados, en medio de una jornada tensa atravesada por vigilias, marchas y cacerolazos convocados por las organizaciones sociales y las principales centrales sindicales en rechazo de la medida. La decisión de Elisa Carrió y las críticas de Cristina Fernández de Kirchner.

Arranca un día clave para el presidente Javier Milei, en el que el Congreso debatirá la nueva ley de Bases y el paquete fiscal, tras varios meses de negociaciones y acuerdos con los bloques opositores dialoguistas. Si bien entre hoy y mañana tendrá lugar la votación general, como ocurrió en febrero, hay tensiones en la votación particular, con varios artículos en puja.

La jornada arrancará a las 10 con la reunión de Labor Parlamentaria, donde los presidentes de cada bloque terminarán de afinar acuerdos preliminares a la sesión que está convocada para las 12. El objetivo del presidente de la Cámara, Martín Menem, es lograr evitar largos debates y las cuestiones de privilegio, por temas de tiempo.

Con un proyecto totalmente reducido a la primera propuesta que se cayó luego de no lograr los acuerdos necesarios para su aprobación, La Libertad Avanza busca otorgarle al presidente facultades delegada, declarar emergencias, algunas ya establecidas por el mega DNU, como así también la privatización de empresas públicas y una reforma laboral, duramente cuestionada por las centrales gremiales.

El jueves 25, el bloque del PRO confirmó el acompañamiento a la ley de Bases y el paquete fiscal al afirmar que «el Gobierno Nacional necesita herramientas para sacar al país adelante».

«Votaremos este primer paso de reforma fiscal para bajar la inflación y devolverle al país la producción, la competitividad y el desarrollo económico que necesita», expresaron en un comunicado.

Por su parte, el bloque de Hacemos Coalición Federal, que preside Miguel Ángel Pichetto, acompañará la medida. En este sentido, el presidente del espacio aseguró «que el Gobierno debe tener los elementos para gobernar», y agregó que «si el Gobierno hubiera hecho una ley más acotada en diciembre ya la hubiera tenido», haciendo alusión al tratamiento anterior, que se cayó por falta de acuerdo, cuando se debatía en particular.

El bloque de Pichetto se encuentra con tensiones internas y en medio de una ruptura, y es que la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, adelantó en una entrevista en La Nación+ que los seis legisladores de su partido se van a separar del bloque para votar en contra de la ley Bases; y lanzó fuertes críticas a ambos proyectos, en una regresión a sus denuncias durante los noventa.

«Con todo el respeto y cariño que le tenemos a Pichetto, el martes nos vamos del bloque», adelantó Carrió. La ex diputada nacional tiene 6 de los 22 legisladores que componen el bloque de Hacemos Coalición Federal. Asimismo, solicitó una «votación nominal, porque esto que está mandando Martín Menem es peor que la votación de los senadores, porque esto es de cara a la Nación».

En este marco, apuntó contra Javier Milei y lo acusó de «tranzar con las mafias», y volvió a insistir en la votación nominal en el artículo sobre el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI).

«Yo puedo garantizar este tipo de inversiones en hidrógeno verde, pero acá yo estoy entregando el nuevo saqueo a la nación. Esta matriz de saqueo va a terminar en una corrupción y va a haber una agencia donde se va a cobrar esto», manifestó Carrió, y agregó: «Esto termina en corrupción porque terminó en los 90», y pidió que haya transparencia. «¿Se van a apoderar de qué? ¿De la parte productiva del país? No, de una nueva economía de extracción, como fue la de YPF, como es litio, cobre, oro… ¿Qué le queda a la Argentina de esas exportaciones? Nada».

Las críticas de CFK

Durante el fin de semana también llegaron las críticas a la ley de Bases y el paquete fiscal de Cristina Fernández de Kirchner. La exvicepresidenta visitó la ciudad de Quilmes en el marco de la inauguración del microestadio Presidente Néstor Kirchner, en donde se refirió a la votación de ambos proyectos: «El lunes se va a tratar en la Cámara de Diputados la famosa ley de Bases, cuyos ejes principales son privatizaciones, reforma laboral, reducciones impositivas, etc., etc.».

«Quiero contarles que cuando Néstor llegó a la Presidencia, cuando ese 27 de abril salió segundo porque se había caído el país, la convertibilidad un año antes, todo era privado. Hasta las jubilaciones, YPF, Aerolíneas Argentinas, todo, todo, absolutamente todo era privado. ¡Hasta las jubilaciones! Yo era diputada nacional, fui senadora desde 1995 y, permanentemente —sobre todo después del ’99—, comenzó a plantearse el déficit fiscal y el déficit cero. Y tuvimos déficit cero. En el año 2000 y 2001 descontaron sueldos, jubilaciones y tuvimos déficit cero. Y se cayó igual. Pero, vuelvo a reiterar para que nadie piense que estoy batiendo el parche contra el superávit fiscal: en este país, en los seis años que hubo superávit fiscal, gobernaba Néstor Kirchner y en el 2008 quien habla. Si, señores. A ver… superávit fiscal 2003, 2004, 2005, 2006, 2007, 2008. ¿Y qué pasó en el 2008? Y… ¡se cayó el mundo! Se cayó el Lehman Brothers. Crisis global a escala global. No se pudo sostener y más tarde, dos años más tarde, se nos invirtió la balanza energética. De un superávit de más de 4.000 millones de dólares en exportaciones energéticas, pasamos a tener que importar por la misma cifra. Éste fue el tema de por qué tuvimos déficit. No es que estemos defendiendo el déficit, pero por esto digo que esa hazaña, eso de la hazaña histórica y demás, ¿por un trimestre, hazaña histórica? Entonces nosotros, que estuvimos seis años, ¿qué somos? ¿Héroes nacionales? No, no, no. ?¿Qué somos, héroes nacionales? No, no».

«Yo sé que a la militancia le gusta la heroicidad, pero no: hombres y mujeres de carne y hueso con responsabilidades especiales que se hacen cargo de la historia y le hacen frente con coraje, eso fuimos. No fuimos héroes. Y, fundamentalmente, con ideas claras», sentenció Cristina, y aclaró: «Nadie está desconociendo la legitimidad de origen del Presidente. Si hay algo que siempre he reconocido es la contundencia y lo inapelable que es el voto popular. Nadie está discutiendo, pero la legitimidad de origen necesita legitimarse también en la gestión y en los resultados de la gestión».

Este domingo a la noche, la dos veces presidenta volvió a referirse al debate: «[Hoy] se va a tratar en la Cámara de Diputados de la Nación la autodenominada ‘Ley de Bases’, cuyo Título III sobre ‘contratos y acuerdos transaccionales’ autoriza al Poder Ejecutivo, ‘por razones de emergencia’, a rescindir o modificar los contratos de obra pública que hayan sido celebrados con anterioridad al 10 de diciembre del 2023, pero… ‘Quedan expresamente excluidos del régimen establecido en esta ley los contratos suscritos en virtud de los procesos de privatización autorizados por la ley N°23.696 y…(adivina qué también)… aquellos contratos que se hayan suscripto en el marco de regímenes de promoción de actividades, programas de estímulo a las inversiones o a la producción'».

«O sea… faculta al presidente a dejar sin efecto 2.308 obras públicas paralizadas en todo el país, de las cuales 119 son universidades nacionales, pero le prohíbe revisar los contratos dolarizados de generación de energía renovable, térmica e hídrica, causa principal del aumento astronómico en las tarifas eléctricas, como demostramos ayer en nuestra charla en Quilmes. No es una buena decisión atarle las manos al presidente en una cuestión tan delicada y que impacta tan negativamente en todas las actividades de la vida cotidiana: industriales, comerciales, clubes de barrio, universidades, y sobre todo en los bolsillos exhaustos de los argentinos», explicó Cristina Fernández de Kirchner.

«Y además de no ser una buena decisión resulta incoherente con la declaración de emergencia en materia de energía establecida en el artículo primero de la referida ley. ¿O la declaración de emergencia solo va a ser para justificar el tarifazo?».

Vigilias, marchas y cacerolazos

En el marco del tratamiento de la ley Bases y el paquete fiscal, las organizaciones sociales y las centrales sindicales convocaron a manifestarse frente al Congreso. Desde las 11 de la mañana comenzará una vigilia en rechazo al proyecto que «paraliza, vacía, y cierra organismos de cultura y comunicación», expresaron desde las secretarías de cultura de la CGT y las dos CTA.

Por su parte, la CTA y la UTEP convocaron a una movilización a las 16 al Congreso: «A pocos días de una de las movilizaciones más grandes de la historia argentina en defensa de la educación pública, los mismos diputados que se negaron a tratar el aumento del presupuesto universitario, el Fondo de Incentivo Docente y la movilidad jubilatoria se aprestan a darle un cheque en blanco a un gobierno decidido a seguir ajustando a los sectores populares para cumplir con el mandato de las grandes corporaciones empresarias».

Mientras que las y los trabajadores nucleados en ATE iniciaron un paro de 72 horas en el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) y mañana martes preparan una movilización al Congreso: «El único lenguaje que entiende el Gobierno es el de los números, y por eso decidimos paralizar todas las exportaciones. Se van a suspender todos los controles en las aduanas, puertos y aeropuertos, y se van a levantar todas las barreras de control zoofitosanitarias en el país», manifestó el secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar.


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