Atacaron la parroquia de Isla Maciel que visitó CFK

Por Alejandro Palladino

Con veinticuatro horas de distancia, dos espacios fueron atacados por patotas. Las similitudes entre las personas que administran estos dos lugares son su posicionamiento crítico ante el Gobierno nacional. También fue muy parecido el modus operandi implementado por los atacantes de arrasar con lo que se cruce. A los golpes que sufrieron los trabajadores del diario Tiempo Argentino, que dejó tres heridos, y la destrucción de su redacción, se le sumó en las primeras horas del domingo el robo a la parroquia Nuestra Señora de Fátima, en el barrio Isla Maciel (Avellaneda), sostenida por el Grupo de Curas en Opción por los Pobres.

“Este robo lo hizo gente preparada y pesada. Si hay alguien pesado dentro del barrio, no roba por acá. Y si son un grupo de pibes, no tienen la infraestructura que tuvieron estos tipos, que vinieron con guantes, no dejaron una sola huella dactilar y rompieron cuatro puertas.»

“Este robo lo hizo gente preparada y pesada. Si hay alguien pesado dentro del barrio, no roba por acá. Y si son un grupo de pibes, no tienen la infraestructura que tuvieron estos tipos, que vinieron con guantes, no dejaron una sola huella dactilar y rompieron cuatro puertas, entre ellas una de rejas resistente. Vinieron a ensuciarme”, dijo Francisco Olveira, cura de la parroquia, a Contexto.

El párroco sostuvo que, en las primeras horas del domingo, un grupo de hombres entró a la parroquia rompiendo las puertas y dirigiéndose a la caja de seguridad. Al no encontrar dinero, robaron materiales utilizados para realizar tareas sociales en el barrio con los jóvenes. Las cosas que se llevaron fueron un proyector, un radiograbador y una computadora.

Olveira relacionó el robo con la cuestión política, considerando la visibilidad que tomó la parroquia tras ser visitada por la ex presidenta Cristina Kirchner luego de su visita a Comodoro Py en abril. La ex mandataria fue invitada a Isla Maciel por el Grupo de Curas en Opción por los Pobres para hablar sobre la conformación del frente ciudadano, principal punto del discurso de CFK ante los miles de militantes y adherentes que la fueron a respaldar. Ese día, en la parroquia le entregaron un informe donde abordaban el avance de la pobreza en el país. Un audio de Whatsapp que registraron los curas durante su conversación con CFK se viralizó rápidamente por la web.

Asimismo, el Grupo de Curas en Opción por los Pobres postea en Facebook cartas en las que describen el estado de situación social que vive el país, en el que los sectores populares se ven perjudicados por las medidas neoliberales del Gobierno de Mauricio Macri. Cada quince o veinte días, publican los principales puntos de la agenda política.

En el último texto, con fecha del 30 de junio, se manifiestan en contra de la encarcelación de Milagro Sala y sus compañeros de la Tupac Amaru. También llaman la atención por “el silencio cómplice de los medios hegemónicos ante el escándalo de los Papeles de Panamá en los que el Presidente de la República y muchos funcionarios brindaron hasta el momento explicaciones insuficientes”.

Además, se expresan críticos por “los despidos en el sector público y privado, el recorte de gasto público en áreas sensibles como Salud y Educación y el claro achicamiento del Estado y la contención social”.

“No hemos visto ni una sola medida en favor de los pobres en siete meses de Gobierno”, dijo Olveira.

Ayer por la mañana, el intendente del FpV de Avellaneda, Jorge Ferraresi, manifestó su apoyo a los curas y se comprometió a reponer los objetos robados y recomponer las partes edilicias destruidas. En su cuenta de Twitter, escribió: “Repudiamos el robo a la Parroquia Ntra. Señora de Fátima de la Isla Maciel. Es una clara amenaza al trabajo del Padre Paco por su comunidad”. Y agregó: “La comuna se hará cargo de reponer todo lo robado y destruido en la Parroquia. No vamos a permitir que a los chicos les quiten sus derechos”.

“Criticamos claramente el modelo económico que lleva adelante este Gobierno, porque esta economía mata. Lo sufrimos en nuestro barrio día a día”, afirmó Olveira.

“No confiamos en las inversiones que se derraman en la gente, algo que nunca ocurre y menos cuando los tipos que dicen que van a venir inversiones se llevan su plata afuera porque no confían en su propio país”, concluyó.


 

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