Por Daiana Giménez
Luego de 22 días de huelga, el 7 de noviembre tras un fallo judicial, parecía haber finalizado el conflicto entre los trabajadores de la Línea Este y la empresa de Osmar Corbelli. Sin embargo, tres meses después los trabajadores se encuentran en estado de alerta trabajando a reglamento.
“Los trabajadores del Expreso La Plata denunciamos que la empresa incumple lo estipulado por la justicia y continúa con la persecución sobre los empleados con sanciones injustificadas” señalan en un comunicado los choferes. Según los trabajadores, Corbelli “aplica indiscriminadamente descuentos de sueldo, suspensiones arbitrarias, modificaciones abruptas de horarios sin aviso previo”.
Cuando la justicia dictaminó en noviembre que sean reincorporados los cesanteados, también señaló que “no va a haber más despidos, desplazamientos ni castigos” injustificados. Sin embargo, los choferes señalan que las represalias y las malas condiciones de trabajo continúan. De ese fallo judicial, la empresa solo cumplió las reincorporaciones.
«Nosotros ahora seguimos como antes del conflicto: la empresa sigue con las represalias y la falta de pagos” explicó a Contexto Daniel Figueredo, chófer del “El Bondi”, agrupación que nació tras la lucha de los trabajadores, y agregó que en noviembre “se pidió que se cese con las represalias, con la suspensiones, con un montón de cosas. Pero la empresa no está cumpliendo con nada”.
Hace unos días los chóferes cobraron recién noviembre. En algunos casos, la explicación que le dieron desde la empresa a los trabajadores, fue que aquellos que estaban con carpeta, es decir en sus casas por alguna cuestión de salud, no deben recibir paga por no tener un “convenio sólido con la ART”.
“Dicen que si la ART no les paga, ellos (la empresa) tampoco. Todos sabemos que los primeros diez días paga el empresario y después sí se hace cargo la ART” explicó en diálogo con Contexto Ezequiel Carone, referente de “El Bondi”.
El sindicato que debería representar a los chóferes es la Unión Tranviarios Automotor (UTA) conducida por Oscar Pedroza, sin embargo cuando el conflicto se agudizó este gremio desoyó a los trabajadores y no asistió a la conciliación obligatoria en el Ministerio de Trabajo.
«La UTA como siempre no hace nada. Tuvimos un apoyo del sindicato los primeros días pero arreglando no lo importante sino lo secundario» señaló Cardone. Los trabajadores, agrupados en El Bondi, rompieron con la relación con este sindicato «porque no nos dieron una mano cuando lo necesitamos». Ahora están esperando el próximo llamado a elecciones para poder tener representación gremial.
“Lo que cambió es que nosotros tenemos algo de poder al ir y pelear las cosas que están pasando mal. Antes no teníamos ni derecho a hablar. Hoy tenemos la posibilidad de sentarnos a discutir lo que está pasando. Por eso es que estamos en la pelea. Ellos toman una medida y nosotros la contrarrestamos tomando la nuestra. Hoy estamos trabajando a reglamento” sentenció Cardone.
Los chóferes señalan que si bien no quieren llegar a nuevos paros, van a trabajar de esta forma hasta obtener soluciones de parte de Corbelli y “a medida que vayan pasando semanas si no tenemos respuesta esto se va ir incrementando”.