Río Negro: “Vamos a recuperar la provincia para sumarla al camino del desarrollo”

Por Flavio Rapisardi (desde Río Negro)

Silvia Horne es una muchacha peronista. De voz cascada, belleza austera, humor en todo tiempo y percepción siempre encendida, no sólo batalla como diputada provincial del FpV-Movimiento Evita en la Legislatura provincial, sino que también recorre asentamientos, cortes de ruta y luchas donde la convocan. Mientras en el Alto Valle del Río Negro se reproducen los cortes de ruta de los productores de pera y manzana, Contexto la acompañó durante un acto feminista y luego de camino a la casa de una compañera de un asentamiento que nos convidó un locro freezado que supimos calentar y acompañar con vino tinto. En este recorrido, Silvia Horne nos graficó claramente la relación entre este conflicto, los desaguisados de un gobernador saltimbanqui y la concentración empresaria que aún debe desarticularse.

-¿Por qué este corte del puentes entre Neuquén y Cipolletti? ¿Qué papel juega el Gobierno nacional?

-En primer lugar, no puede desconocerse que el Gobierno nacional siempre ha puesto recursos en nuestra economía regional. En esta última década, año tras año llegaron aportes millonarios para sostener la rentabilidad de la actividad, para amortiguar los efectos de la crisis internacional. Los aplica desde una distribución que tiene en cuenta a todo el resto de las regiones del país y a todas las actividades económicas, a la mesa de los argentinos, y fundamentalmente al sector más vulnerable de la cadena, los trabajadores.

-Y el sector productor-empresario ¿qué contraparte aporta a estos subsidios? ¿Y el sindicato de trabajadores rurales?

-Básicamente la co-responsabilidad empresaria consiste en que ellos registren a sus trabajadores, y durante la emergencia el Estado nacional (o sea, el resto de los argentinos) les paga las contribuciones patronales; ellos no las pagarían de su bolsillo, ya que aducen que es muy caro el “costo laboral”. Pero no quisieron firmar ese compromiso a fin del año pasado. Perdieron tiempo, y ahora se plantan con piquetes, sitiando a todos los rionegrinos. Y lo paradójico es que quien debiera ser el mayor aliado de ese blanqueo de trabajadores, la UATRE, el Momo Benegas, está cubriendo las espaldas de la CAFI (NdR: CAFI representa al sector que ha concentrado la rentabilidad de la actividad frutícola; son poquitas firmas, pero comercializan la casi totalidad de la producción, el 90% de la exportable, que es el destino privilegiado de la actividad), y apunta toda la agresividad contra nuestro candidato a gobernador, el senador Pichetto.

«no puede desconocerse que el Gobierno Nacional siempre ha puesto recursos en nuestra economía regional. En esta última década, año tras año llegaron aportes millonarios para sostener la rentabilidad de la actividad, para amortiguar los efectos de la crisis internacional.»

-En este marco, ¿cómo se desata este nudo de intereses hegemónicos o antipopulares?

-La clave es la opacidad de este negocio. El productor desconoce en tiempo real el precio pagado por su fruta en ultramar, y espera, y en el mientras tanto, la comercializadora les va dando adelantos para tareas: curas, fertilizantes, poda, entre otras. Modalidad que viene desde las latitas de los mensú, o las que les dan por la lana a los paisanos de la región sur y que luego están obligado a seguir sus directivas del “adelanto”. Así, los más grandes siempre dicen que están en crisis. Lo que es terminal es el sistema, el estrangulamiento de la cadena de la comercialización en pocas manos.

-Entonces, ¿nuevamente el problema es la concentración?

-Quizás el concepto «terminal» alerta respecto de cambiar también el tipo de intervención desde el Estado. En vez del subsidio a la actividad privada, se podrían volcar esos recursos, durante emergencias como la de este año, para adquirir la producción de los más pequeños y recuperar en la reventa y en la compra de insumos para alimentos escolares, carcelarios, hospitalarios, etcétera, y allí sí constituir un Fondo Rotatorio de verdad, para darle continuidad al apoyo.

Priorizar así a los productores que nos permiten conservar la fisonomía del Valle, frutihortícola y ganadero, de familias que pueden seguir viviendo de la actividad agropecuaria. Hay que ampliar el RENAF y darle protagonismo a esos productores. De otro modo, todo lo que se vuelca en dinero o subsidio de cualquier tipo va a parar siempre al mismo nudo, el grupo concentrado que comercializa, exportando o descartando para las jugueras o mandando a los chacareros a un callejón sin salida. Hay que dinamizar la forma de poner recursos de todos los argentinos para que no favorezca la actual inercia concentradora.

-¿Y que hizo el Gobierno provincial luego de sus saltos políticos camaleónicos?

-La provincia, bueno, el gobernador Weretilneck, hizo votar la Ley Nº 5012 promulgada el 12 de enero pasado por la que todos los ingresos que genera la actividad frutícola van a parar al propio sector a modo de “subsidio”, como parte de mayores recursos, sumándole fideicomisos no especificados, y otros obtenidos del cobro de un canon por tonelada de fruta egresada por la barrera fitozoosanitaria, que, de acuerdo con un “Plan para una Fruticultura Sustentable”, daría soluciones de fondo. Sin embargo, ante los resultados, evidentemente vemos que no lo ha administrado. Incluso anunció también un fondo proveniente del Bono Fijo de la renegociación petrolera para la fruticultura, que tampoco ha aplicado. En realidad, sólo ha contribuido el gobernador a generar presión para hacerla estallar en los estos días preelectorales.

-Es decir, ¿este ex gobernador del Frente Grande, luego devenido massista y ahora a la deriva de la mano de los capitales petroleros, utiliza el conflicto?

-Creo que el trasfondo es un tiro por elevación a las pautas macroeconómicas del modelo que nos ha permitido estos doce años incluir a las mayorías al consumo y al disfrute de derechos. Es decir, quieren otra paridad cambiaria, que sea conveniente para los exportadores, aunque perjudique a los demás; quieren a toda costa esta devaluación. El oportunismo de Weretilneck les resulta útil. Tambien juega el Momo Benegas exponiendo a los trabajadores, que, junto a los dirigentes de la Federación de Productores, lamentablemente, son funcionales a esta estrategia, que se caracteriza por poner todo en riesgo y que el jugo sea para unos pocos.

-La traición continua a los trabajadores rurales por parte de Momo Venegas ya es parte del horizonte político argentino. ¿No se produjeron movimientos por parte de los propios productores afectados?

-Hubo un solo momento en que se rompió esa inercia, cuando los productores ocuparon las sedes de las exportadoras exigiendo el precio real de su fruta. Pero duró muy poco esta búsqueda de equilibrio, ya que la crisis en el gobierno de Río Negro, que finalmente fue un cambio de mando del FpV a este señor, que representa la vuelta a los 28 años anteriores al 2011, les permitió a los grupos concentrados recalcular y agrupar detrás de ellos a todo el sector.

Crean la sensación de que está todo mal, cada vez peor, y ponen a todos en el mismo grado de conflicto, lo cual no es cierto. No es la misma situación la de las peras y las manzanas, salvo que ambas se denominan frutos de pepita. Porque tienen otros trayectos, otros valores, y en la producción la pera no tiene competencia, es un mercado casi en su totalidad argentino, por su exclusividad, calidad, etcétera. En realidad, es la pera quien aporta el mayor volumen y facturación.

Esto no es nuevo, tuvimos un gobernador famoso, Pablo Verani, que salía en un tractor junto a un mafioso conocido, “el huevo Ramos”, acompañando los piquetes, y con esa demagogia el radicalismo gobernó 28 años. Y estos tres últimos de Weretilneck lo mismo, ya que ha tomado como hombre de consulta al alter ego de Verani, un personaje llamado “el Fino Sartor”. Ahora Weretilneck ya no se sube al tractor, sino que reparte en los piquetes manzanas con su sello “W 2015”. Es una medida que tiene un gran trasfondo político, por eso no hay desembolso que los conforme, van a quedarse igual hasta el ultimo día en las rutas.

-El domingo son las elecciones…

-Bueno, a Weretilneck le quedó corta la frazada de Massa, con quien trianguló compras de equipos de seguridad con el bono de la renegociación de Petrobras, pero ahora que Massa ya no le suma, responsabiliza al Gobierno nacional de sus propios desaguisados y fracasos. Nacionaliza el conflicto para involucrar la figura del candidato de FpV Miguel Pichetto, que ha recibido explícitamente el respaldo de Cristina y con quien ahora vamos juntos a recuperar la provincia para sumarla en el camino de la igualdad y el desarrollo.


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