Retenciones: Fernández insistió con su aplicación, pero volvió a señalar la traba en el Congreso

Rodeado de referentes políticos cercanos a su gestión y, sobre todo, a su posición en el crucial momento que atraviesa la alianza que lo llevó al gobierno que encabeza, el presidente Alberto Fernández participó de un encuentro en la sede partidaria del justicialismo porteño en vísperas de la conmemoración del 212 aniversario de la Revolución de Mayo, y a diecinueve años de la asunción del gobierno de Néstor Kirchner. 

En medio de una interna que se desató en el marco de la escalada generalizada de precios, acentuada por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, el mandatario aprovechó también para mostrarse rodeado de varios de los integrantes de los gabinetes de Néstor y Cristina Kirchner, como Daniel Filmus (actual ministro de Ciencia y Tecnología), Agustín Rossi (ex ministro de Defensa), Ginés Gonzalez García (ex ministro de Salud) y Jorge Taiana (actual ministro de Defensa). 

Además, estuvieron presentes otros integrantes de su gabinete, como Matías Kulfas (uno de los apuntados en la interna como responsable de la situación actual); el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; el de Desarrollo Social, Juan Zabaleta; y el de Turismo y Deportes, Matías Lammens. 

En ese marco, en un breve diálogo que mantuvo con la señal de noticias C5N, Fernández insistió con la posibilidad de aumentar las retenciones a los principales productos exportables del sector agrícola como método para desacoplar los actuales precios internacionales de las materias primas de los del mercado interno. 

«Está muy bien que los precios internacionales suban, porque eso supone que redunda en ingresos de dólares que la Argentina necesita», sostuvo, pero agregó que «no esta bien que los precios internacionales se apliquen al mercado interno». «Esos problemas se resuelven con retenciones, que son un instrumento que la economía tiene para desacoplar los precios internos de los internacionales», señaló en esa línea. 

Sin embargo, a pesar de la insistencia, consideró que por el momento el debate que propone desde hace unos días no puede sino ser en el ámbito público, ya que la oposición adelantó que trabaría cualquier intento desde el Congreso. «Están aquellos que piensan que la economía o la inflación está vinculada a la moneda y la emisión monetaria, y piensan que hay que dejar que el mercado modere estos precios. Y los que piensan que el Estado debe intervenir para equilibrar las necesidades internas y no hacer padecer a los argentinos», manifestó. 

En términos de gestión, volvió a ponderar el crecimiento en términos de producción y creación de empleo, pero analizó nuevamente que el Gobierno encuentra en la inflación uno de los principales problemas para mejorar la distribución. «La inflación complica salarios que venían muy devaluados de la época de Macri. Siempre le pido a todos los argentinos que recuerden que entre 2003 y 2015 el salario real de los argentinos creció un 19 %, pero entre 2015 y 2019 cayó un 20 %. En términos reales, cuando nosotros asumimos, el salario valía lo mismo que en 2003. Es una caída estrepitosa», dijo. 


SECCIONES