Por Gabriela Calotti
“No cobramos desde hace cinco meses y no podemos seguir esperando”, denunció Mariana Cattáneo, subsecretaria de Cultura y Educación de SUTEBA, acompañada por unos 25 trabajadores docentes que se desempeñan en ese Programa, a la espera de ser recibidos por algún responsable de la Dirección General de Cultura y Educación (DGCyE) del Gobierno de María Eugenia Vidal.
La delegación de docentes que trabajan en el Programa de Coros y Orquestas Infantiles y Juveniles del Bicentenario, presente en 22 distritos de la provincia, se concentraron ayer a partir de las 10:30 de la mañana frente al edificio de 13 entre 56 y 57.
La provincia se había comprometido a pagarles el 27 de julio, es decir, la semana pasada, casi al término, inclusive, de las vacaciones de invierno. “No nos pagaron nada y ahora queremos que nos reciba alguien con responsabilidad política”, afirmó Cattáneo en diálogo con Contexto.
Recién hacia las 14:30 fueron derivados hacia el área de Negociaciones Colectivas, donde esperaban ser recibidos por su director, Carlos Jiménez.
Allí, pudieron conocer algunos distritos en los cuales se efectuarían los pagos pero sin especificaciones y lograron construir una comisión de seguimiento de los programas socioeducativos que comenzará este jueves a las 14, conformada por los sindicatos; el director provincial de negociaciones colectivas, Miguel Garófalo; y Aurelia Furnari, directora provincial de políticas socioeducativas. La espectativa de los trabajadores es que a partir de dicha reunión se pudiera acordar un cronograma de pago y que se conozcan los responsables regionales para saber a dónde tienen que hacer el reclamo y evitar, de este modo que cada trabajador se tenga que acercar a la ciudad de La Plata para hacer consultas.
La dirigente sindical denunció el vaciamiento de este Programa que cuenta con más de 160 orquestas y 140 coros en todo el país.
Bajo el título “Entre la inoperancia y el vaciamiento”, SUTEBA denunció la semana pasada en un comunicado un “nuevo incumplimiento de parte de las autoridades de la DGCyE con los trabajadores del Programa Nacional de Coros y Orquestas”, pues puso de “manifiesto la falta de compromiso” de las autoridades a las demandas docentes y de la comunidad educativa.
El sindicato docente consideró que esa “política de vaciamiento” que lleva adelante el macrismo a nivel nacional, provincial y municipal queda en evidencia pues no sólo no garantiza el pago de los salarios, sino que no cubre los cargos vacantes y tampoco el funcionamiento pleno del Programa.
El hecho de no haber cobrado sus haberes de cinco meses tal como se había comprometido Aurelia Furnari, directora provincial de Políticas Educativas, según aseguró SUTEBA, “es un indicador de la inoperancia de esta gestión educativa y del vaciamiento que están produciendo de los Programas Nacionales”.
El Programa de Coros y Orquestas del Bicentenario nació en 2010 en el Conurbano bonaerense, impulsado por el Gobierno nacional con el objetivo de mejorar el acceso de los niños, niñas y jóvenes a los bienes y servicios culturales, tender puentes hacia la reinserción de los jóvenes en la escuela, colaborar con la retención escolar y estimular el contacto y el disfrute de la música.
La experiencia iniciada en el Conurbano y en 22 distritos bonaerenses en total fue adoptada progresivamente por las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán, Chaco, Mendoza, La Rioja, Catamarca, San Juan, Santa Fe, Entre Ríos, La Pampa, Neuquén, Chubut, Santa Cruz, Córdoba y Misiones.
Supuestamente, la provincia debía hacerse cargo del pago de salarios pues “lo pasaron de Nación a provincia”, explicó Cattáneo, pero hasta el día de hoy los docentes no recibieron nada.
La iniciativa impulsada por el kirchnerismo puso en marcha un modelo colectivo de enseñanza musical para vincular con la escuela a jóvenes que se encuentran fuera del sistema y colaborar con la retención de aquellos cuya permanencia se halla en situación de vulnerabilidad.
Sus artífices partieron de la convicción de que el acceso a los bienes culturales modifica ciertas conductas y hábitos que se reflejan en el fortalecimiento de la autoestima, el aprendizaje del trabajo en equipo, la responsabilidad y la proyección hacia un futuro de realizaciones.
En abril pasado, docentes y alumnos del Programa protagonizaron un concierto abierto frente al Palacio Pizzurno, sede del Ministerio de Educación de la Nación, para reclamar la continuidad de su trabajo y la financiación del funcionamiento de los coros y orquestas.
En esa ocasión volvieron a denunciar la situación del Programa en cada provincia. En algunas de ellas habían cobrado los sueldos pero no contaban con el presupuesto necesario para el debido funcionamiento. En otros casos, el último sueldo cobrado había sido el de diciembre y tampoco les habían solicitado la documentación para la renovación de los contratos.
