Por Maximiliano Ceci
“Mi sombra dice, que reirse, es ver los llantos, como mi llanto, y me he callado, desesperado y escucho entonces, la tierra llora”, dice la trova que grita cada cubano y cierra el documental Canción de Barrio que realizó Alejandro Ramírez Anderson sobre la gira de Silvio Rodríguez por las calles de Cuba. Los vecinos ilegales, los solidarios que se prestan el agua, las paredes desmoronadas, los baños con cielo raso de estrellas, las no paredes, el cableado que raya el cielo, los prisioneros de la Habana son las imágenes que viven en las crónicas que la periodista cubana Mónica Rivero escribió en el libro “Por todo espacio, por este tiempo”.
Las crónicas, acompañadas por las fotografías de Ramírez Anderson, compilan los testimonios de los dos primeros años de la gira de Silvio Rodríguez por barrios cubanos. Este “libro de viaje” -como lo define su autora- se presentará hoy a las 17 horas en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata, y contará con la presencia de Rivero y Carlos Rodríguez del multimedio “Cuba es Otra Historia”.
“Llegábamos a los barrios y nos poníamos a hablar con los vecinos. Nos contaban sus historias de vida y lo poníamos en contexto con sus pensamientos acerca del recital de Silvio. No íbamos con un guión preconcebido. Íbamos por los barrios viendo que historias encontrábamos”, dijo Rivero y añadió: “La poesía está en la gira misma. La verdad está en los barrios. Esto pretende ser un acercamiento, una ventana, un cuento personal de lo que hemos visto”.
“LA POESÍA ESTÁ EN LA GIRA MISMA. LA VERDAD ESTÁ EN LOS BARRIOS. ESTO PRETENDE SER UN ACERCAMIENTO, UNA VENTANA, UN CUENTO PERSONAL DE LO QUE HEMOS VISTO”.
Luego de recorrer prisiones por toda Cuba, itinerario que lo llevó a frente a más de 40 mil reclusos del país, Silvio comenzó a presentarse en lugares pobres, en mal estado arquitectónico, en conflictos sociales de diverso tipo, con poco acceso a determinados espacios de la vida económica y cultural. El texto literario y fotográfico que teje la crónica del recorrido se trata de una obra con cuatro actores: la voz, la mirada, el patrimonio musical y el barrio en la durísima cotidianidad del país, sin sensiblerías. “La revolución triunfó y llevó a cabo la campaña de alfabetización. Estamos hablando de más de 50 años. Todas las medidas que se han tomado crearon un piso de garantías, entendiéndolas como el medio y no como el fin para la sociedad que hace que Cuba tenga mejores índices en relación a la salud y educación. Pero eso no quiere decir que no haya cosas que no estén bien o que puedan ser mejores aún”, dijo Rivero.
Además, el libro explora, asimismo, en torno al significado de la gira para el cantautor, la trascendencia para su imagen, para su carrera e incluso para lo que representa y defiende su obra, el discurso de la Nueva Trova, el legado de su generación.
Rafael de la Torre, compositor cantante, guitarrista y comediante, fundador de la Nueva Trova, miembro de la UNEAC (Unión Nacional de escritores y Artistas de Cuba) estará a cargo del cierre. Las imágenes, los testimonios, la voz del pueblo cubano, sumado a las trovas a cargo de la Torre, van a darle a los pasillos de la Facultad de Periodismo la atmósfera de la Habana.
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