El gobernador bonaerense mantuvo este martes reuniones con distintos intendentes del oficialismo y la oposición, con los que trabajó sobre la continuidad de la cuarentena administrada y les adelantó que habrá una asistencia financiera para los municipios por la caída en la recaudación en el marco del aislamiento social.
Uno de los puntos más destacados durante la reunión fue la propuesta de reestructuración de la deuda que la Administración provincial ultima para presentar ante los acreedores externos. Desde Gobernación adelantaron que la oferta contiene un período de gracia de tres años (idéntico al pedido por el gobierno nacional), una quita importante de intereses y una rebaja menor del capital de la deuda. El monto que renegociará durante las próximas semanas supera los 7.000 millones de dólares.
Según confirmaron a Contexto fuentes cercanas a la Administración bonaerense, la propuesta contempla un ahorro del 55% de los intereses de la deuda. La quita se hará «a partir de una estructura de cupones escalonado a partir de 2023, hasta alcanzar un cupón máximo sostenible. Esta estructura de cupones permitirá un ahorro en el pago de intereses entre 2020 y 2027 de aproximadamente el 55%».
Además, prevé una quita aproximada del capital de la deuda en torno al 7%, y una extensión de la vida promedio de los títulos de deuda que pasarían de los actuales 4,7 años a trece. La quita entre capital e intereses podría alcanzar los 5.000 millones de dólares entre 2020 y 2030.
La propuesta tiene similares características a las de Nación: el período de gracia contemplado es el mismo, y la reducción del peso de la deuda también está enfocada en los intereses con una menor quita de capital.
Por otro lado, el gobernador le adelantó a los intendentes presentes en los dos encuentros que encabezó por separado que «el gobierno provincial obviamente va ayudar a todos los municipios, y ya lo estamos instrumentando. La idea es que las prestaciones básicas municipales, aunque haya caído la recaudación, se puedan cubrir con asistencia provincial».
La caída en los niveles de recaudación en el marco de las medidas de aislamiento afectó a las arcas de casi todos los municipios. La asistencia financiera seguramente continúe más allá de los primeros desembolsos que haga la Administración de Kicillof. La misma lógica que el Estado nacional aplica en cuanto a la asistencia a las provincias con mayores inconvenientes fiscales.
Cabe recordar que semanas atrás se especuló con la posibilidad de que se volvieran a emitir cuasimonedas en distintos puntos del país, incluida la provincia de Buenos Aires, pero el gobierno descartó esa posibilidad y aseguró que continuaría asistiendo a los municipios y gestionando más recursos ante Nación.
Por otro lado, las autoridades bonaerenses que participaron de los encuentros (entre ellos, el jefe de Gabinete, Carlos Bianco; el ministro de Economía, Pablo López; el secretario general del Gobierno, Federico Thea; y la ministra de Gobierno, Teresa García) les pidieron a los intendentes que continúen con la elaboración de propuestas para encarar el nuevo período de cuarentena administrada que podría sumar más actividades a las exceptuadas por el decreto presidencial que limita la circulación.
En la primera reunión participaron Leonardo Nardini (Malvinas Argentinas), Fernando Gray (Esteban Echeverría), Fernando Espinoza (La Matanza), Mariano Cascallares (Alte. Brown), Mario Secco (Ensenada), Jorge Ferraresi (Avellaneda), Ariel Sujarchuk (Escobar) y Gustavo Menéndez (Merlo).
Jorge Macri (Vicente López), Jaime Méndez (San Miguel), Miguel Fernández (Trenque Lauquen), Julio Garro (La Plata), Maximiliano Suescun (Rauch), Daniel Cappelletti (Brandsen) y Manuel Passaglia (San Nicolás) fueron los intendentes opositores que estuvieron en el segundo encuentro.
