Luego de que la Justicia Electoral hiciera lugar al pedido de la fiscalía para que Karen Reichard encabece la nómina, el Gobierno nacional decidió apelar. Ahora será la Cámara Nacional Electoral la que defina quién reemplazará a José Luis Espert como primer candidato, tras su renuncia al comprobarse sus vínculos con el empresario acusado de narcotráfico Federico “Fred” Machado.
El juez del Juzgado Federal N°1 de La Plata, Alejo Ramos Padilla, dio lugar la apelación presentada por el Ejecutivo, que sostiene que el tercero en la lista, Diego Santilli, debe ocupar el lugar de Espert y no Reichard, quien figuraba en el segundo puesto.
Cabe recordar que el Gobierno ya había formulado este planteo ante Ramos Padilla, al tiempo que solicitó reimprimir todas las boletas para reemplazar a Espert por Santilli en la Boleta Única de Papel. El magistrado rechazó esa medida, pero ante la apelación dispuso que sea la Cámara Electoral la que resuelva. Resta ver si el tribunal convocará al resto de los partidos a pronunciarse, tal como lo hizo el juez platense.
La presentación se da a 17 días de los comicios. En su recurso, La Libertad Avanza pidió que “se eleven los autos a la Cámara Nacional Electoral, a quien se peticiona que revoque la decisión en crisis, con la premura y urgencia del caso, evitando cualquier posible dilación que afecte la inmediata intervención de la Alzada”.
El debate sobre la reimpresión de boletas deja a la Cámara con escaso margen. Por un lado, están los costos: implicaría unos 12.000 millones de pesos, aunque el Gobierno asegura que el presupuesto vigente contempla ese “extra” no previsto tras la baja de Espert. Por otro, los tiempos. Si se ordena reimprimir, deberán retirarse y destruirse las boletas anteriores, imprimir las nuevas y distribuirlas en apenas dos semanas.
El trasfondo de la discusión remite a los principios de la ley de paridad de género. Tanto la fiscal como el juez sostienen que la norma busca garantizar la representación de las mujeres en las listas. En ese sentido, que Santilli —ubicado en el tercer lugar— pase a encabezar por encima de Reichard implicaría una regresión en materia de paridad. La representante del Ministerio Público Fiscal incluso citó jurisprudencia en el caso de la senadora neuquina Lucila Crexell, donde, tras el fallecimiento del primer candidato, la Justicia Electoral dispuso que ella, en segundo término, debía liderar la lista para no contrariar “el propósito final de la ley, que es la protección de la mujer”.
El Gobierno, en cambio, interpreta la normativa de otro modo. Se apoya en el artículo que establece que, si un candidato es dado de baja por cualquier motivo, “será reemplazado por la persona del mismo género que le sigue en la lista”.
En su resolución, Ramos Padilla advirtió que la maniobra implicaría que “el candidato varón N°3 (Diego Santilli) saltee a la candidata mujer N°2”, y que para cumplir con el artículo 60 bis del Código Electoral Nacional —que impide que dos personas del mismo género queden contiguas— se produciría “un efecto cascada” donde todos los candidatos varones antecederían a las mujeres con mejor ubicación, reduciendo sus posibilidades de acceder a un cargo.